miércoles, 2 de enero de 2008

SÉ FELIZ


Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro. A partir de aquel instante comenzó a buscarla.

Primero se aventuró por el placer y por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por la fama y la gloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de los viajes, del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano.

En un recodo del camino vio un letrero que decía: "Le quedan dos meses de vida".

Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida se dijo: "Estos dos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia, de saber y de vida con las personas que me rodean"

Y aquel buscador infatigable de la felicidad, al final de sus días encontró que en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que le dedicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir, estaba el tesoro que tanto había deseado. Comprendió que para ser feliz se necesita amar, aceptar la vida como viene, disfrutar de lo pequeño y de lo grande, conocerse a sí mismo y aceptarse como se es, sentirse querido y valorado, querer y valorar a los demás, tener razones para vivir y esperar y también razones para morir y descansar. Entendió que la felicidad brota en el corazón, que está unida y ligada a la forma de ver a la gente y de relacionarse con ella; que siempre está de salida y que para tenerla hay que gozar de paz interior.

Y recordó aquella sentencia que dice: "Cuánto gozamos con lo poco que tenemos, y cuánto sufrimos por lo mucho que anhelamos equivocadamente".

2 comentarios:

Silvia Cristina Cuesta dijo...

Con que hermoso blog me encontre´
Maravilloso el texto que lei.

Me emocione´ mucho.
LLegue hasta aqui buscando algo sobre los hijos.
Y Dios me dijo hace clic aqui
y asi fue.
Lo que lei sobre ellos me gusto.
Segui mirando y estaba este texto esperandome.

Pero como soy un poco pedigueña quisiera saber si me permite tomar algun texto de su blog y publicarlo en el mio.Citando desde ya su procedencia.

Desde ya muy agradecida!!

Plrenamente feliz!! Silvia
Soy una persona muy agradecida a Dios.

Hermano José dijo...

No necesitas permiso para publicar o tomar lo que publico... nada es nuestro... todo viene de arriba.