martes, 28 de abril de 2009

LENTE DE CONTACTO


Brenda era una joven mujer que fue invitada a escalar rocas. Aunque esto le causaba mucho miedo, fue con su grupo a un tremendo risco de granito.

A pesar de su miedo, se colocó el equipo, tomó un extremo de la cuerda y comenzó a enfrentar la roca. En determinado momento, llegó a un borde, donde pudo tomar un respiro.

Mientras estaba ahí, la cuerda de seguridad golpeó contra un ojo de Brenda y le sacó su lente de contacto. Bueno, ahí estaba ella en el borde de la roca, con cientos de metros bajo ella y cientos de metros sobre ella. Por supuesto que buscó y buscó, esperando que hubiera caído en el borde, pero simplemente no estaba la lente.

Ahí estaba ella, lejos de casa, con su vista borrosa. Estaba desesperada y comenzó a enfadarse, por lo que oró al Señor para que la ayudase a encontrar su lente. Cuando llegó a la cima, un amigo examinó su ojo y su ropa buscando la lente, pero no la pudieron encontrar. Ella se sentó, desalentada, con el resto de la gente, esperando a que los demás llegaran a la cima.

Ella miró a través de las montañas, pensando en el verso de la Biblia acerca de que los ojos del Señor observan alrededor de toda la tierra y pensó:
-Señor, Tú puedes ver estas montañas. Tú conoces cada piedra y cada hoja, y Tú sabes exactamente dónde está mi lente de contacto. Por favor ayúdame

Finalmente, bajaron. Al pie de la montaña había un nuevo grupo de alpinistas comenzando a enfrentar el risco. Uno de ellos gritó:
-Oigan, jóvenes! ¿Alguien perdió una lente de contacto?”

Bueno, esto hubiera sido suficientemente inquietante, pero… ¿Sabes cómo el alpinista vio la lente de contacto? Una hormiga se movía lentamente a través de la roca, cargando la lente.

Brenda me dijo que su padre era caricaturista. Cuando ella le platicó esta increíble historia de la hormiga, la oración y la lente de contacto, él dibujó una caricatura de una hormiga cargando una lente de contacto, diciendo:
-Señor, no sé por qué Tú quieres que yo cargue esta cosa. No puedo comérmela, y está extremadamente pesada. Pero si eso es lo que Tú quieres que yo haga, yo la cargaré para Ti.

1 comentario:

Anónimo dijo...

hermoso: explicativo de la actitud correcta, con que debemos enfrentar la vida, asumir riesgos y apesar de las dificultades, sabemos q existe un Dios, q constantemente vela por nosotros y sin saber como, el nos presenta las soluciones de las maneras mas inexplicables. gracias Dios