martes, 24 de noviembre de 2009

2012 - ¿MIEDO AL 22 DE DICIEMBRE DEL 2012?


¿Miedo a qué? ¿A que se acabe el mundo? ¿Por qué no te preocupas por el fin del tuyo? Quien no la debe... no la teme.

¿Por qué ahora el Apocalipsis tiene reputación de ser un libro misterioso y difícil de entender, y para muchos Apocalipsis tiene sentido terrorífico? ¿Acaso será porque algunos buscan en él mensajes secretos que podrían referirse a nuestro tiempo?

Comprenderemos mejor este Apocalipsis si interpretamos las visiones, las cifras y símbolos de acuerdo a las reglas de la literatura apocalíptica. Veremos entonces que el Apocalipsis de Jesucristo no es ni difícil ni terrorífico sino lleno de alegría y esperanza.

Cristo resucitado es el centro de la historia; el mundo es el escenario de la lucha de la Iglesia, encabezada por Cristo, y las fuerzas del demonio; los cristianos son llamados a dar valientemente su testimonio.

Para los que quieran documentarse un poco más. Se puede reconocer en el Apocalipsis siete series de elementos cada una, distribuidas en cuatro grandes partes:
-Los siete mensajes a las iglesias. Cap. 1-3
-Balance del Antiguo Testamento. Cap. 4-9
-La Iglesia se enfrenta con el imperio romano. Cap. 11-19-19,6
-Los últimos tiempos y la Jerusalén celestial. Cap. 20-22

Date cuenta, pues, de dónde has caído, recupérate y vuelve a lo que antes sabías hacer, de lo contrario iré donde ti y cambiaré tu candelero de su lugar. Eso haré si no te arrepientes. Pero ya es algo positivo que rechaces la conducta de los nicolaitas, que yo también aborrezco. Apo. 2, 5-7

Sé que sufres y eres pobre y, sin embargo, eres rico. Sé como te calumnian los que pretenden ser judíos y no lo son, pues su sinagoga es la de satanás. No tengas miedo por lo que vas a padecer. El diablo meterá a algunos de ustedes en la cárcel para ponerlos a prueba. Serán diez días de prueba. Permanece fiel hasta la muerte y te daré la corona de la vida Apo. 2, 9-10

Recupérate, pues, sino iré pronto donde ti para combatir a esa gente con la espada de mi boca Apo. 2, 16

Al que venga y se mantenga en mis caminos hasta el fin, le daré poder sobre todas las naciones, las regirá con vara de hierro y las quebrará como vasos de barro. Será como yo, que recibí de mi Padre este poder. Y le daré la estrella de la mañana Apo. 2, 26-28

El vencedor vestirá de blanco, nunca borraré su nombre del libro de la vida, sino que proclamaré su nombre delante de mi Padre y de sus ángeles Apo. 3, 5

Al vencedor lo pondré como columna en el Templo de mi Dios, de donde nadie lo sacará. Grabaré en él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad que baja del cielo, la nueva Jerusalén que viene de Dios, y mi nombre nuevo Apo. 3, 12.

Al vencedor lo sentaré junto a mí en mi trono, del mismo modo que yo, después de vencer, me senté junto a mi Padre en su trono Apo. 3, 21

Mira que vengo pronto.

Después me dijo el ángel: Estas palabras son ciertas y verdaderas. El Señor, que es Dios de los profetas y sus espíritus, ha enviado a su ángel para que muestre a sus servidores lo que ha de suceder pronto. Y voy a llegar pronto.

Feliz el que guarda las palabras proféticas de este libro.

Yo Juan, vi y oí todo esto. Al terminar las palabras y las visiones caí a los pies del ángel que me había mostrado todo esto, para adorarlo, pero él me dijo: No lo hagas, yo soy un servidor como tú y tus hermanos los profetas y como todos los que escuchan las palabras de este libro. A Dios tienes que adorar.

También me dijo: No pongas en lenguaje cifrado los mensajes proféticos de este libro, porque el tiempo está cerca. Que el pecador siga pecando y el manchado siga ensuciándose, que el bueno siga practicando el bien y el santo creciendo en santidad.

Voy a llegar pronto, y llevo conmigo el salario para dar a cada uno conforme su trabajo. Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y Fin Apo. 22, 6-12

Felices los que lavan sus ropas, porque así tendrán acceso al árbol de la vida y se les abrirán las puertas de la ciudad. Fuera los perros, los hechiceros, los impuros, los asesinos, los idólatras y todos los que aman y practican la mentira Apo. 22, 14

Yo, por mi parte, advierto a todo el que escuche las palabras proféticas de este libro: Si alguno se atreve a añadir algo, Dios echará sobre él todas las plagas descritas en este libro. Y si alguno quita algo a las palabras proféticas, Dios le quitará su parte en el árbol de la vida y en la Ciudad Santa descritos en este libroApo. 18-19

POR LO QUE SE REFIERE A ESE DÍA Y CUÁNDO VENDRÁ, NADIE LO SABE, NI SIQUIERA LOS ÁNGELES DE DIOS, NI AÚN EL HIJO, SINO SOLAMENTE EL PADRE Mt. 24, 36
Biblia Latinoamericana

¿Todo esto que acabas de leer te parece terrorífico? Para mí es puro amor. Esta parte del libro del Apocalipsis es la que le toca leer a los que siguen los caminos del Señor. Todo el resto es para los que no creen en Él... ¡qué se preocupen ellos!

Nadie sabe si amanecerá mañana vivo en este mundo… sólo Dios lo sabe. Es mejor estar preparado, y si eres un seguidor de los caminos de Dios no tendrás porque preocuparte. Todos los días se le acaba el mundo a millones, y esto es palpable, hasta el más ignorante sabe que hay gente que muere todos los días. ¿Llegaremos nosotros a ver el fin del mundo?... el nuestro sí, en cualquier momento.

LA FECHA LA PONDRÁ DIOS CUANDO SEA SU VOLUNTAD, NO LOS MAYAS, NI NOTRADAMUS, NI PERICO DE LOS PALOTES

Es malo apostar, pero si fuera bueno, yo apostaría que el mundo se acabará antes o después del 2012. Es apostar sobre seguro, porque sólo DIOS manda. Si es antes, a buena hora, y si es después… suerte para algunos que todavía no se convierten… tendrán más tiempo. No creo que Dios les de gusto a los Mayas y su 2012, con todo el respeto que se merecen.

Creo que con este artículo respondo a todos los correos que me han llegado preguntándome la fecha. Cada cierto tiempo se pone de moda El fin del mundo, pero ni aún así la gente se convierte.
Bendiciones por casa.
José Miguel Pajares Clausen
24 de Noviembre 2009

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