No se puede meter a todo el mundo en el mismo saco.Me he tomado la molestia de analizar todos los programas de Cable que hablan sobre religión, y a Jesús lo meten en el mismo saco con lideres de otras religiones. Solamente existen actualmente dos o tres programas de Cable que son Católicos.
Una vez pregunté en una de nuestras reuniones de los viernes, quién era la contraparte de Jesús (lo hice con segunda intención), y todos contestaron que la contraparte de Jesús era Satanás.
Mi desilusión fue grande y me eché la culpa por no haber predicado lo suficiente como para no escuchar esa respuesta. Jesús es Dios y Dios no tiene contraparte. La contraparte de Dios tendría que ser otro Dios y otro Dios no existe.
En los programas de Cable se habla científicamente sobre Jesús, pero como si fuera un profeta más. (La Fe va de la mano con la Ciencia, y esto lo acepta la Iglesia). No estoy denigrando la importancia que tuvieron, Buda, Ala, etc., sino que no se debería poner a Jesús como si tuviera contraparte. Su nacimiento tan especial y su Muerte-Resurrección lo saca de contexto. Nadie a nacido de la forma como el nació, ni murió y resucitó como Él. Ninguna religión habla sobre sus profetas con esas condiciones.
Si yo no tuviera una fuerte convicción sobre mi fe, les aseguro que estos programas me harían dudar... son muy convincentes. Me imagino que los que producen estos programas tienen una intención... la de debilitar nuestra fe, y deben estar auspiciados por grupos con esa específica intención.
No solamente meten a Jesús en el mismo saco, sino que ahora pretenden quitarle valores a Juan Pablo II - su representante en la Tierra - antes de su beatificación. Eso parece una contienda política donde se buscan las debilidades de los postulantes para anularlos. Nos están metiendo diariamente, a través de los medios de comunicación, que Juan Pablo II no debe ser canonizado por tal o cual motivo.
Lo que si sé que el Vaticano está lleno del demonio trabajando en contra del Dios verdadero y sus representantes genuinos. El demonio tiene mucha fuerza, y este es su mundo donde se puede mover a sus anchas.
Pido a los catequistas y líderes de Grupos de Oración, inculcar una fe verdadera entre sus discípulos, seminaristas, y sobre todo la difusión de la Palabra a través de los laicos, que ahora se está convirtiendo en una fuerza mayor que la de los sacerdotes, como dijo Juan Pablo II.
Que Dios y su Santísima Madre los bendigan.
José Miguel Pajares Clausen
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